Buenos días!!!
En primer lugar, vamos a despedir como se merece a 2012... sí, porque realmente no nos podemos quejar de año... y visto lo visto, seguir a flote en este año profético y agorero al máximo es ya suficiente motivo como para considerar que ha estado guay.
Así que saquemos los brillos, las lentejuelas, los taconazos, el dorado, el champagne, bengalas y fuegos artificiales... miremos el reloj y esperemos con alegría y nerviosismo cómo las agujas del reloj se van acercando peligrosamente a las 12 (ojo, no nos pongamos nerviosos y empecemos a comer uvas con los cuartos que sino ya mala suerte para todo el año nuevo).